Pico Gilbo desde Horcadas

Presentación de la ruta

Dentro del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre, se encuentra la localidad de Horcadas, N-621 km 85.6, en el municipio de Riaño, y es el lugar elegido para iniciar la ruta al Pico Gilbo un clásico de la Montaña de Riaño y del Parque Regional.

En los últimos tiempos este modesto pero esbelto pico se ha puesto de moda en las redes sociales lo que ha llevado a que intentar su ascensión en fin de semana o periodo vacacional desde Riaño se convierte en un caminar en un río de gente que asciende hasta la cima, lo que desde nuestro punto de vista resta mucho del atractivo, por eso hemos escogido la localidad de Horcadas, ya que es una vía mucho menos utilizada y más tranquila además de poder recorrer la arista sur que nos lleva a la cima y que nos ofrece las mejores vistas.

Tendremos que tener en cuenta que esta arista tiene unos 50 metros de los 200 que recorremos por la misma en que es más expuesta y puede no ser apto para personas no acostumbradas a caminar por montaña y zonas con cierto riesgo, por ese motivo la hemos hecho circular para que quienes tengan dudas en vez de subir directamente por la pared lo hagan por la cara norte donde un cómodo y marcado sendero nos lleva a la cima y allí decidir si bajamos por la divertida arista o regresamos por el mismo sitio que nos da más seguridad.

Distribución de los kilómetros

0,0 km. Nos dirigimos hacia la iglesia que se ve en un alto del pueblo, atravesando la localidad que es pequeña, pero se encuentra muy cuidada.

0,5 km. Al llegar a la iglesia veremos un camino que se interna en el monte y un cartel informativo, unos metros más adelante el camino se bifurca, cogeremos el de la derecha. La pista nos va enfilando, en progresión ascendente hacia el murallón que componen la Peña de los Serrones y el Pico Gilbo que vemos en el extremo derecho de la Peña.

1,2 km. Llegamos a un abrevadero para el ganado en este punto podemos encarar hacia la Peña entre el monte bajo, nosotros hemos decidido seguir el camino, más limpio y cómodo que nos lleva a la base de la Peña donde ya empiezan a encontrarse hitos.

2,5 km. Llegamos al pie de la pared, la línea del sendero gira hacia la izquierda por un sendero hasta alcanzar una pequeña terraza, lugar donde tiraremos a derecho hacia arriba, en busca de la arista.

2,6 km. Llegados a la arista toca girar hacia la derecha, siguiendo todavía el marcado sendero, poco después no queda otra que cabalgar la arista que en su tramo final se afila hasta llegar a la cima.

3,0 km. Llegamos a la cima donde las vistas que hasta aquí son magnificas pasan a ser espectaculares en 360º convirtiendo al Gilbo en, quizás, el mejor balcón o mirador de la montaña de Riaño y del Parque Regional lo que le ha llevado a ser tan popular.

La bajada por la cara norte donde el sendero está muy marcado es sencilla, aunque hay que hacerla con cuidado a los resbalones por el terreno, siendo este sendero el utilizado por el 99 % de las personas que ascienden a la cima para subir y bajar.

3,9 km. Una vez alcanzado el Collado de la Pedrera giramos a la derecha tratando de no perder altura para acabar enlazando con el camino que nos llevó hasta la pared.

Insistimos que si no tenéis mucho practica en montaña y zonas aéreas o expuestas sigáis el track ascendiendo por la cara norte para garantizaros la llegada a cima, ya que el recorrido de la arista, aunque muy divertida hay un mínimo de personas que no se atreven a realizar lo que os obligaría a no poder hacer cima por muy poco…

4,7 km. Regresamos de nuevo a sendero por la que ascendimos antes de encarar hacia la pared.

5,0 km. Llegamos de nuevo a la pista por la que subimos

5,6 km. Desandamos la pista hasta el collado El Raso, pero esta vez lo rodeamos por el otro lado.

6,7 km. Llegamos de nuevo al tramo urbano de Horcadas

6,9 km. Fin de la ruta.

Tipo de terreno

La ruta es apta para todos los públicos, el acercamiento a la Peña se realiza por un camino en buen estado.

Recomendamos el uso de botas de montaña para este tipo de rutas o ascensiones que siempre nos protegerán más los pies de golpes y los tobillos de posibles torceduras.

Flora

Los hayedos merecen una primera mención, generalmente encontrados en las umbrías, y en substrato calizo o silíceo. Entre las hayas se intercalan árboles o corros de roble albar, abedul, argomeno, arce y llamera o negrillo.

Con talla arborescente abundan el acebo, el mostajo y el tejo. En el matorral abunda el brezo, arándano, escoba y el piorno. También el verdemonte y gayuba. Entre los arbustos son comunes los avellanos y frambuesos

En otoño los paisajes son intensamente cromáticos, y prácticamente en la totalidad del verano el color verde lo invade todo.

Fauna

No es de extrañar, sobre todo a primera hora, avistar algún animal salvaje cruzando fugazmente por delante de nuestro paso. Y si levantamos la vista seguramente divisamos una gran variedad de aves rapaces.

En la zona de Horcadas coexisten el armiño, cabra montesa, corzo, rebeco, ciervo común o venado, jabalí, lobo gato montés, ardilla común, garduña, la marta, nutria, erizo, conejo común, liebre común, lirón careto, musaraña común, topo de agua, topo común, ratón de campo, zorro, tejón común.

La variedad de aves es abundante. Encontraremos especies de aves rapaces como azor, gavilán, águila real, búho chico, mochuelo, búho real, busardo ratonero, águila culebrera, halcón peregrino, milano negro, lechuza común y cárabo

Carroñeras como la corneja, cuervo, quebrantahuesos, alimoche y el buitre leonado.

Y multitud de aves más pequeñas pero no por eso menos interesantes como el  mito, alondra común, martín pescador, bisbita común, bisbita alpino, vencejo real, pardillo común, ruiseñor bastardo, mirlo acuático, cuco, herrerillo común, pico picapinos, pico mediano, pito negro, escribano montesino, escribano cerillo, petirrojo, pinzón vulgar, arrendajo, alcaudón dorsirrojo, alcaudón real, ruiseñor, roquero rojo, roquero solitario, gorrión alpino, lavandera blanca, lavandera cascadeña, lavandera boyera, collalba gris, oropéndola, autillo, carbonero garrapinos, colirrojo tizón, pito real, acentor alpino, acentor común, chova piquigualda, chova piquirroja, camachuelo, becada, verderón serrano, trepador azul, , estornino, estornino pinto, curruca capirotada, urogallo, treparriscos, chochín, mirlo común, mirlo capiblanco y zorzal charlo.

Recomendaciones generales

Con un calzado y ropa inadecuados o en días lluviosos, con hielo o nieve es peligroso hacer esta ruta.

Mantener la tensión y la concentración durante todo el trayecto. Sobre todo, cuando entramos en la Peña y al final en el tramo de la arista sur. Es una ruta que se disfruta mejor en primavera, verano y en otoño. Aplicarse antes y varias veces durante la travesía algún protector solar es muy recomendable.

Es aconsejable ir bien provistos de agua y algo de comida ligera como frutos secos, alguna barrita energética o fruta. Muchas poblaciones del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre no disponen de ningún servicio para abastecernos más allá de caños o fuentes con una excelente agua

Antes de iniciar la ruta infórmese de las previsiones meteorológicas de la jornada. No camine bajo tormentas, días con niebla o con presencia de ventisca. Tenga en cuenta que en el Parque Regional los inviernos son largos y fríos y los veranos cortos y suaves.

Las mínimas invernales pueden alcanzar los 20 grados bajo cero y en verano entre 7 y 0 grados. Las temperaturas máximas en verano no suelen sobrepasar los 30 grados. En alta montaña estos datos pueden variar considerablemente, especialmente las invernales.

Lea detenidamente la documentación de la ruta en nuestra web para hacerse una idea más precisa de las exigencias de la ruta, tanto físicas como técnicas.

Si realiza la ruta en solitario informe a alguien de sus planes y ruta concreta que va a realizar. No salirse del camino señalizado para evitar perderse y dañar especies vegetales por pisoteo. Respetar las zonas privadas.

Está prohibido recolectar frutos, ramas, hojas, plantas, piedras, ni animales y subirse a los árboles, piedras y vallas. No hacer ruidos que puedan molestar a la fauna sobre todo en época de cría y reproducción. Mantener los perros bajo control.

Cuando te encuentres un cierre ya sea un simple alambre o una puerta más elaborada dejarla como te la hayas encontrado, es decir, cerrada o abierta.

No acampar, no hacer fuego y sobre todo tener en cuenta que la basura no vuelve sola.