Description
Introducción
Esta travesía, dividida en tres interesantes etapas, no es simplemente un recorrido más por una comarca determinada; es una inmersión total en Sanabria.
El diseño de esta ruta, que incluye zonas y poblaciones esenciales, no es coincidencia. Creemos que es fundamental experimentar desde dentro el valle del Tera para admirar la impresionante huella dejada por la glaciación. Sentir la naturaleza tan de cerca mientras pedaleamos por un bosque es una experiencia gratificante. Desde la cima de una montaña, es fascinante contemplar la comarca, los pueblos y el majestuoso Lago de Sanabria. A pesar del paso del tiempo y las nuevas construcciones, se puede percibir la esencia que aún conservan muchos pueblos de la zona.
Si tenéis tiempo, os recomendamos acercaros a conocer la historia del castillo de Puebla de Sanabria y comprender su importancia en siglos pasados. Otra opción es disfrutar de los audiovisuales que se proyectan en La Casa del Parque del Lago de Sanabria, que ofrecen una visión rápida pero muy informativa sobre la formación de los valles por los que hemos pedaleado y del propio Lago de Sanabria, el más grande de origen glaciar de la Península Ibérica. Por supuesto, también os animamos a quedaros y disfrutar con calma de la gastronomía local.
Deseamos que hayáis disfrutado de esta magnífica ruta tanto como nosotros al diseñarla especialmente para vosotros.
¡Gracias por elegir Sanabria! De parte de todo el equipo de Rutasen, os enviamos un cordial saludo.
Presentación
Después de haber superado el primer gran reto de la Sanabria Pulse Bike Tour, atravesando gran parte del valle glaciar del río Tera, nos sumergimos en esta segunda etapa, no menos fascinante, por caminos y senderos por dentro de los más extensos y tupidos bosques de robles de la comarca.
Esta etapa tiene una distancia de 55 km con un desnivel positivo acumulado de 1296m, lo cual es notablemente menor que en la primera jornada. Destaca el inicio, pues los primeros 12 km nos brindan un descenso constante hasta llegar a Requejo. Siguiendo el camino Mozárabe-Sanabrés, pero en sentido contrario a Santiago.
Después de realizar esta etapa lo que más recordaremos será: espesos bosques de robles, bonitos pueblos, prados verdes, helechos de gran tamaño y divertidos senderos.
Atravesaremos arroyos pintorescos que inevitablemente nos tentarán a inmortalizar el momento con nuestras cámaras como por ejemplo el Arroyo de la Mondera muy cerca de Avedillo de Sanabria.
Las formas y colores varían según las estaciones, desde el verde intenso de finales de primavera y verano hasta los colores variados del otoño.
En contraste con la primera etapa, esta nos lleva a través o muy cerca de más de una decena de poblaciones donde podremos observar a nuestro paso algunas antiguas construcciones que, aunque están muchas de ellas en ruinas todavía mantienen su esencia y significado a través de su arquitectura tradicional, con casas de piedra y tejados de pizarra.
En nuestra ficha técnica detallaremos punto por punto los lugares de interés y las zonas que requieren mayor precaución. Aunque esta etapa no presenta grandes desafíos técnicos ni “trialeras”, hay tramos, aunque breves, con desniveles muy pronunciados y a la vez terrenos pedregosos. Según nuestra habilidad y condición física, quizá necesitemos descender de la bicicleta en algún momento.
Desde Sotillo de Sanabria parte la Ruta de las Cascadas de Sotillo, una de las rutas más populares y pintorescas de la comarca de Sanabria. Esta ruta permite a los visitantes explorar una serie de impresionantes cascadas y disfrutar de paisajes naturales de gran belleza. Para más información consultar la ficha técnica en la web de Rutasen.
Descripción kilométrica
0,0 km. Partimos de la población de Padornelo atravesando parte del núcleo urbano en dirección a un pequeño túnel que atraviesa la autovía A-52.
3,6 km. Cruzamos el río Castro por un puente.
7,0 km. Enlazamos con el Camino Mozárabe Sanabrés, pero en dirección opuesta a Santiago de Compostela.
11,7 km. Llegamos a Requejo de Sanabria, atravesando gran parte del núcleo urbano. ¡Atención al cruzar la N-525!
14,7 km. Pasamos por la parte alta de San Martín de Terroso, cambiando de dirección hacia las densas laderas de la sierra.
17,9 km. Tras circular por senderos rodeados de robles y castaños y abundante vegetación, nos acercamos a Santa Colomba de Sanabria.
19,2 km. Cruzamos el Arroyo de la Mondera con la ayuda de un puente.
19,5 km. Estamos en Avedillo de Sanabria y nos dirigimos hacia Peña Alta, afrontando un corto pero empinado ascenso.
23,1 km. Circulamos cerca de San Román de Sanabria. En esta población se encuentra un imponente castaño, tan grande que se necesita más de una decena de personas para rodearlo completamente.
25,6 km. Cruzamos el Arroyo de las Truchas, cuyas aguas alimentan las Cascadas de Sotillo. Poco antes del arroyo, parte la senda que lleva a estas cascadas.
26,0 km. Llegamos a Sotillo de Sanabria y, tras atravesar el pueblo, iniciamos un ascenso por un camino de montaña hacia la cañada Sanabresa.
30,8 km. Intersección con el GR-84 (Cañada Sanabresa).
34,8 km. Tras recorrer un camino de montaña, el terreno se convierte en sendero y rápidamente iniciamos el descenso hasta Galende. ¡Atención! al tramo final asfaltado donde se puede se puede alcanzar alta velocidad y además circulan coches ocasionalmente.
35,2 km. Llegamos a la carretera ZA-104, ya en Galende. Es recomendable bajarse de la bici para cruzar con seguridad. Una vez hecho esto, iniciamos un descenso a través del pueblo. ¡Mantened siempre control sobre la velocidad!
37,1 km. Desviamos del camino principal girando a la izquierda hacia un tramo con fuerte pendiente. Posteriormente, cruzamos el río Tera a través de un puente.
37,3 km. Alcanzamos la Playa Fluvial La Corneira. ¡Atención! al cruzar la carretera ZA-P-2664.
38,6 km. Llegamos a la localidad de Villarino, encontrándonos con la carretera ZA-P-2661.
40,9 km. Nos incorporamos a la carretera ZA-P-2665. Solo rodaremos 200m por ella, pero tendremos que girar a la izquierda para abandonarla. ¡Mucha precaución! al realizar esta maniobra con el tráfico rodante.
42,5 km. Alcanzamos la carretera ZA-P-2663. Justo a nuestra derecha y cercana, se encuentra la localidad de Valdespino. ¡Atención salimos a la carretera en una curva con escasa o nula visibilidad!
44,6 km. Nos encontramos cercanos al núcleo urbano de Sampil.
46,6 km. Llegamos a la localidad de El Puente y nos encontramos con la carretera ZA-104. Es esencial ¡mantener la atención! en todo momento en este sector hasta salir completamente del área urbana debido al tráfico rodante que nos puede acompañar. Posteriormente, cruzamos el río Tera y, poco después, el arroyo de las Truchas.
50,3 km. Llegamos a Castro de Sanabria.
54,2 km. Llegamos a Puebla de Sanabria y cruzamos el puente de piedra que pasa sobre el río Castro. Desde este punto y hasta el final de la ruta, estaremos rodando por una carretera con tráfico abierto. ¡Mucha atención! Es esencial mantenerse pegados al borde derecho de la carretera y tener sumo cuidado al realizar maniobras de cambio de dirección.
55,0 km. Zona de baño de Puebla de Sanabria.
Tipo de Terreno
Después de atravesar el tramo urbano de Padornelo y haber cruzado la autovía A-52, nos encontraremos ciclando por un camino carretero que, gradualmente, se inclinará convirtiéndose en un descenso de 12 km hasta llegar a la localidad de Requejo de Sanabria.
Una vez que hayamos dejado atrás la localidad de Requejo y después de ciclar unos kilómetros por una pista, entraremos directamente en un espeso bosque donde la vegetación estará muy cerca de nuestro sendero.
Cruzaremos ríos y arroyos por puentes de piedra o madera, rodeados de exuberante vegetación, conformando paisajes de gran belleza, como el río Castro, el arroyo de la Mondera, el arroyo de las Truchas y, finalmente, en Puebla, el río Tera. Cabe mencionar que algunos de estos puentes pueden no ser muy seguros, por lo que recomendamos bajarse de la bicicleta y cruzar caminando.
El descenso desde Avedillo es por una pista en la que nuestra bicicleta ganará velocidad muy rápidamente. No obstante, hay que tener precaución, ya que vehículos pueden transitar hacia explotaciones ganaderas cercanas.
A pesar de que gran parte de la sierra tiene una orientación similar, nuestra ruta cambiará constantemente, alternando subidas y bajadas. Es fundamental prestar atención al camino y dosificar las energías.
En general, el terreno será compacto y liso, especialmente en caminos carreteros. Sin embargo, debido a las lluvias, podríamos encontrar socavones que esquivar y piedras producto de desprendimientos. Es posible que nos topemos con ramas grandes o árboles caídos.
En la ficha técnica se muestra un gráfico con la clasificación detallada de los tipos de terreno, indicando la distancia y el porcentaje de cada uno. Existirán tramos cortos e inevitables por carretera que conectan poblaciones; son vías con poco tráfico. Al pasar por localidades, es lógico que transitemos por zonas urbanas, que a veces coinciden con la carretera.
Salvo en ciertos tramos, como después de Avedillo o en el ascenso pasando Sotillo, nuestras vistas estarán limitadas al entorno cercano. Sin embargo, tendremos una magnífica oportunidad de admirar el Pico Bubela (1464 m.) al acercarnos a Sotillo de Sanabria.
Flora
Aunque en Sanabria predominan los robles y castaños, algunos de los cuales son de un porte extraordinario, como el situado en la población de San Román, por la que pasamos muy cerca, no debemos olvidar otros árboles como abedules y alisos.
Esta etapa es, sin duda, la mejor de las tres para sumergirse en la impresionante y viva vegetación sanabresa. A pesar de que la cota más alta de esta ruta no supera los 1400 m., esto garantiza una rica diversidad vegetal. A la vasta cantidad de robles en los bosques se suma el omnipresente matorral, rico en especies, siendo el helecho uno de los más predominantes. La combinación de robles y helechos configura un escenario de constante belleza. En zonas más húmedas, los abedules son una constante, mientras que tejos, serbales y sauces se encuentran en menor cantidad. Sin embargo, el aliso es el rey en estas áreas húmedas.
Fauna
Sanabria es un paraíso de diversidad, tanto en flora como en fauna. Es común que, mientras se explora la región, se pueda avistar algún ciervo, corzo o incluso un jabalí. Aunque estos últimos suelen ser más nocturnos. En todo caso cualquier encuentro con cualquier especie será casi siempre fugaz. Emergen de entre la vegetación con tanta fuerza y agilidad que desaparecerán con tanta velocidad como aparecieron delante de nosotros. Estos avistamientos son más comunes al amanecer.
Además, la región alberga una variedad de anfibios y reptiles. Es probable cruzarse con lagartos, lagartijas y diferentes tipos de culebras, especialmente cerca de los arroyos. Es crucial respetar y dejar tranquilos a estas especies, especialmente a las víboras. Una mordedura de víbora no solo es dolorosa, sino que requiere atención médica inmediata. Es esencial subrayar la importancia de no dañar ni matar a ningún animal, además de ser un acto irrespetuoso con la naturaleza, las penalizaciones pueden ser severas.
El cielo sanabrés suele estar surcado por aves rapaces, como el águila real, el gavilán, el azor y varios tipos de halcones. También es posible avistar aves como garzas, grullas, perdices y palomas torcaz.
Los ríos de la zona, por otro lado, son hogar de barbos y bogas. Si se tiene suerte, se podría ver a una nutria disfrutando de un refrescante baño. Aunque en tiempos pasados los ríos estaban llenos de truchas, hoy en día son una rareza.
Por último, en esta etapa es menos probable que en la etapa primera, pero podemos encontrarnos con ganado vacuno pastando cerca o dentro de nuestro camino. Estas pueden estar cuidadas por enormes mastines que es mejor si se ponen nerviosos bajarse de la bici y seguir un tramo andando tranquilamente.
¡Nunca se sabe qué sorpresas puede deparar la rica biodiversidad de Sanabria!.
Recomendaciones
Aunque encontrarán múltiples fuentes de agua en el camino, es aconsejable llevar agua embotellada. Dada la longitud de esta ruta, una mochila de hidratación puede ser la mejor opción.
Si bien esta etapa no parece requerir tantos repuestos y accesorios como la primera, siempre es prudente ir preparados. Llevar lo esencial puede evitar inconvenientes como pinchazos o roturas de cadena.
Sorprendentemente, en esta zona, las moscas pueden llegar a ser molestas, especialmente en los días más calurosos. Si te inquietan durante las subidas, cuando la velocidad es menor, considera llevar una mosquitera solo para la cabeza. No será necesario usarla durante toda la etapa.
A pesar de que no atravesaremos altitudes tan elevadas como en la primera etapa, siempre es esencial consultar el pronóstico del tiempo.
Por último, recomendamos visitar la web de Rutasen para conocer los alojamientos y restaurantes colaboradores en la zona. Al presentar el código QR que descargaron junto con el track y este documento, disfrutarán de descuentos en servicios seleccionados.
Cómo llegar al inicio de la ruta
Desde Madrid:
- Autovía A-52 en dirección a Galicia.
- Toma la salida 99 hacia Padornelo.
- Aproximadamente 300 metros después, verás un señalamiento de «ceda el paso».
- Gira a la derecha para incorporarte a la N-525 en dirección a Padornelo.
- La distancia hasta Padornelo será de aproximadamente 1,3 km.
- El punto de inicio de la ruta se encuentra cerca de la estación de servicio.
Desde Galicia:
- Autovía A-52 en dirección a Madrid.
- Toma la salida 103 hacia Padornelo.
- Continúa recto y luego incorpórate a la N-525 en dirección a Padornelo.
- Padornelo está a unos 2,3 km de la salida.
- La ruta comienza en la estación de servicio.