Lago Ausente y Peña de Requejines desde Cebolledo

Presentación de la ruta

El Lago Ausente (1740 msnm), es un lago de origen glaciar, alimentado por las nieves que caen sobre el Pico Ausente (2041 msnm) y Peña de Requejines (2026 msnm), todo ello en la Sierra de Sentiles, en la localidad de Isoba, municipio de Puebla de Lillo, Alto Porma. La forma más cómoda, conocida y transitada para llegar a él es desde la Estación de Esquí de San Isidro, situada en el Puerto de San Isidro que separa León de Asturias.

Esta ruta marcada como PR-LE.26 tiene dos partes bien diferenciadas. La primera que es la ascensión al Lago Isoba, desde el Circo de Cebolledo en la Estación de Esquí de San Isidro, esta parte es muy popular en invierno para hacerla con raquetas, son 3 km y 120 metros de desnivel positivo es muy sencilla y cómoda ideal para hacer con niños y la segunda que es la ascensión desde el lago a Peña de Requejines (2026 msnm), 266 metros de desnivel positivo. En el track veréis que hemos hecho las dos partes y que la convierte en una ruta circular de unos 7 km de longitud y 386 metros de desnivel positivo. Es una ruta bonita y cómoda y sin ninguna complicación técnica si se realiza sin nieve, ¡¡OJO!!

Distribución de los kilómetros

0,0km. Aparcaremos el coche en el aparcamiento de Cebolledo y si miramos hacia el sur veremos un camino que circula por la derecha de la Sierra que es la de Sentiles y que sale de la entrada al aparcamiento donde hay un cartel informativo.

2,8 km.  Nos desviamos a la derecha por una especie de canal que nos llevara en unos doscientos metros al lago. Este último tramo es el más complicado y peligroso, el desnivel a superar son unos 50 metros en apenas doscientos metros. Este último tramo que no conlleva gran dificultad, con nieve puede llegar a complicarse mucho ya que se hiela hasta el punto de que las raquetas de nieve no son efectivas. Mucho ojo en este tramo en condiciones invernales, recomiendo llevar crampones ya que una caída por la ladera puede ser fatal. Sin nieve o hielo no presenta ninguna dificultad técnica más allá del cuidado en laderas con fuerte pendiente.

3,1 km.  Hemos llegado al Lago Ausente. En invierno fácilmente podemos encontrarlo completamente helado o directamente cubierto de nieve, tengamos en cuenta que estamos en una zona donde las nieve puede llegar fácilmente a los 3 o 4 metros de espesor.  El lago sin nieve puede rodearse fácilmente no así con nieve.

Una vez en el lago podemos regresar por el mismo camino o iniciar la ascensión a Peña Requejines. Si decidimos lo último, lo haremos por la arista de la derecha, situada al norte del lago. Es una arista muy cómoda y nada peligrosa a pesar de lo que pueda parecer vista desde el lago. Pero ojo con nieve, sin raquetas y sin crampones puede ser tremendamente peligroso. Incluso puede ser peligroso para raquetas por la dureza del hielo, recomiendo llevar siempre crampones por si acaso.

La subida a Peña de Requejines desde el lago son 900 metros lineales y 266 metros de desnivel, sin ninguna dificultad técnica más allá del desnivel, insisto sin nieve.

4,6 km. Llegamos a la cima y las vistas son espectaculares, al este vemos al fondo Picos de Europa, al sureste el Macizo de Mampodre, al noroeste la Sierra de la Cuerna y toda la Sierra de Sentiles, estamos en la parte sur de la sierra, entre otros muchos picos más.

Toca empezar la bajada, lo que realizamos por la cara norte de Peña de Requejines. Bajamos 600 metros lineales y 127 metros de desnivel negativo.

5,2 km. Llegamos a la Collada de Requejines o de Sentiles, este tramo es muy cómodo y sencillo de realizar incluso con nieve.

Giramos a nuestra derecha, bajando en dirección noreste, en este tramo bajamos unos 400 metros lineales y 140 metros de desnivel negativo. Este tramo con un marcado sendero sin mayor dificultad técnica volvemos a la insistencia de tramos anteriores, con nieve puede ser muy peligroso ya que la ladera tiene una fuerte inclinación y es un tramo sombrío que suele estar muy helado por lo que vuelvo a recomendar los crampones ya que las raquetas pueden llegar a ser inservibles por la dureza del hielo junto con la inclinación de la ladera.

Estamos a unos 1750 metros de altitud, nos queda bajar otros 60 metros de desnivel negativo y 400 metros lineales para enlazar con el camino inicial.

6,1 km. Llegamos a la pista de nuevo y estamos a un km del punto de partida. Solo nos queda regresar por la pista hasta el aparcamiento. Tenemos un desnivel de unos 60 metros negativos.

7,0 km. Fin de la ruta.

Tipo de terreno

La ruta es apta para todos los públicos, se realiza por un camino en buen estado los 2,8 primeros km, pasando luego a sendero bien hitado. Tendremos muy en cuenta el desnivel a superar ya que este puede resultar muy duro para personas no acostumbradas. Debemos tener en cuenta que esta ruta en invierno, con nieve y hielo puede resultar muy peligrosa.

Recomendamos el uso de botas de montaña para este tipo de rutas o ascensiones que siempre nos protegerán más los pies de golpes y los tobillos de posibles torceduras.

Flora

En esta zona del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre abunda el brezo, arándano, escoba y el piorno. Poco más podemos ver, es una zona de alta montaña en la que apenas veremos algún árbol. Desde el camino podemos ver zonas húmedas, turberas. Es una zona de extraordinaria belleza a pesar de la ausencia de bosques.

En la cara este de la montaña, en el Valle Pinzón, aunque desde la cima no se pueda ver, tenemos un hermoso hayedo.

En otoño los paisajes son intensamente cromáticos, y prácticamente en la totalidad del verano el color verde lo invade todo.

Fauna

No es de extrañar, sobre todo a primera hora, avistar algún animal salvaje cruzando fugazmente por delante de nuestro paso. Y si levantamos la vista seguramente divisamos una gran variedad de aves rapaces.

En el municipio de Puebla de Lillo en general, coexisten el armiño, cabra montesa, corzo, rebeco, ciervo común o venado, jabalí, lobo gato montés, ardilla común, garduña, la marta, nutria, erizo, conejo común, liebre común, lirón careto, musaraña común, topo de agua, topo común, ratón de campo, zorro, tejón común.

La variedad de aves es abundante. Encontraremos especies de aves rapaces como azor, gavilán, águila real, búho chico, mochuelo, búho real, busardo ratonero, águila culebrera, halcón peregrino, milano negro, lechuza común y cárabo

Carroñeras como la corneja, cuervo, quebrantahuesos, alimoche y el buitre leonado.

Y multitud de aves más pequeñas pero no por eso menos interesantes como el  mito, alondra común, martín pescador, bisbita común, bisbita alpino, vencejo real, pardillo común, ruiseñor bastardo, mirlo acuático, cuco, herrerillo común, pico picapinos, pico mediano, pito negro, escribano montesino, escribano cerillo, petirrojo, pinzón vulgar, arrendajo, alcaudón dorsirrojo, alcaudón real, ruiseñor, roquero rojo, roquero solitario, gorrión alpino, lavandera blanca, lavandera cascadeña, lavandera boyera, collalba gris, oropéndola, autillo, carbonero garrapinos, colirrojo tizón, pito real, acentor alpino, acentor común, chova piquigualda, chova piquirroja, camachuelo, becada, verderón serrano, trepador azul, , estornino, estornino pinto, curruca capirotada, urogallo, treparriscos, chochín, mirlo común, mirlo capiblanco y zorzal charlo.

Recomendaciones generales

Con un calzado y ropa inadecuados o en días lluviosos, con hielo o nieve es peligroso hacer esta ruta.

Es una ruta que se disfruta mejor en primavera, verano y en otoño.

Aplicarse antes y varias veces durante la travesía algún protector solar es muy recomendable.

Es aconsejable ir bien provistos de agua y algo de comida ligera como frutos secos, alguna barrita energética o fruta. Muchas poblaciones del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre no disponen de ningún servicio para abastecernos más allá de caños o fuentes con una excelente agua.

Antes de iniciar la ruta infórmese de las previsiones meteorológicas de la jornada. No camine bajo tormentas, días con niebla o con presencia de ventisca. Tenga en cuenta que en el Parque Regional los inviernos son largos y fríos y los veranos cortos y suaves.

Las mínimas invernales pueden alcanzar los 20 grados bajo cero y en verano entre 7 y 0 grados. Las temperaturas máximas en verano no suelen sobrepasar los 30 grados. En alta montaña estos datos pueden variar considerablemente, especialmente las invernales.

Lea detenidamente la documentación de la ruta en nuestra web para hacerse una idea más precisa de las exigencias de la ruta, tanto físicas como técnicas.

Si realiza la ruta en solitario informe a alguien de sus planes y ruta concreta que va a realizar. No salirse del camino señalizado para evitar perderse y dañar especies vegetales por pisoteo. Respetar las zonas privadas.

Está prohibido recolectar frutos, ramas, hojas, plantas, piedras, ni animales y subirse a los árboles, piedras y vallas. No hacer ruidos que puedan molestar a la fauna sobre todo en época de cría y reproducción. Mantener los perros bajo control.

Cuando te encuentres un cierre ya sea un simple alambre o una puerta más elaborada dejarla como te la hayas encontrado, es decir, cerrada o abierta.

No acampar, no hacer fuego y sobre todo tener en cuenta que la basura no vuelve sola.