Castillo y trincheras de Villamalur

Presentación de la ruta

 Villamalur es un municipio perteneciente a la comarca castellonense de Alto Mijares y es considerado el pulmón verde de la Sierra de Espadán. Con menos de 100 habitantes está dentro del programa de despoblamiento denominado ruta 99, donde se encuentran los 24 municipios de la Comunitat Valenciana con menos de 100 habitantes.

Su núcleo urbano se sitúa en un precioso emplazamiento sobre un monte elevado por encima de los campos y barrancos. Los orígenes exactos de la población no se conocen, aunque su fundación debe ser musulmana, dado que el castillo alzado en sus proximidades tiene ese origen.

Su nombre actual, que ya aparece documentado en 1489, según algunos autores podría haber sustituido a su anterior y olvidada denominación musulmana. Antiguo lugar de moriscos fue repoblado por aragoneses durante la primera mitad del siglo XVII. Si bien en 1715 tenía 148 habitantes, no experimentaría -al contrario de lo que sucedió con la gran mayoría de los pueblos valencianos- gran incremento de población, ya que a finales del mismo tiene 135 habitantes. Aunque durante el XIX crecerá y llegará a tener 546 moradores en 1900, pero a partir de este año su población iniciará un continuo retroceso, más acusado a partir de 1960.

Este origen hace que el casco urbano de Villamalur siga manteniendo un clarísimo aspecto musulmán, con calles estrechas y concéntricas que se suceden entre las paredes encaladas de las casas.

Iniciamos la ruta dejando el pueblo atrás para ascender por el camino dirección al castillo, junto a la Fuente de la Era Concejo. A los 600m tomamos una senda indicada a la izquierda para subir al mismo, se trata de un tramo exigente debido a la fuerte pendiente.

De esta forma llegamos a las ruinas del castillo, construcción musulmana de los siglos X-XIII y ubicado en una elevada montaña desde donde se domina gran parte de la sierra. Existen, todavía en pie, varias torres, un aljibe originalmente cubierto con bóveda, vestigios de canalizaciones. Gran parte de los restos que podrá observar el visitante son de origen cristiano, pues el castillo de Villamalur fue notablemente reformado tras la conquista. Además, podremos encontrar algunas trincheras restauradas de la Guerra Civil Española, las primeras de la ruta.

Tras deleitarnos con las increíbles vistas, donde casi las únicas construcciones entre los bosques son las del pueblo, volvemos por nuestros pasos al camino del castillo para seguir hacia la izquierda por el bonito camino entre pinos, alcornoques y almendros. De esta forma llegaremos a la senda que sube hasta el cerro del Cabezo.

Allí encontramos las construcciones defensivas que forman parte de la línea XYZ o línea Matallana, formada por casi 150 kilómetros de trincheras, búnkeres, parapetos, nidos de ametralladoras y refugios, representando la mayor línea fortificada de la historia de España. Las trincheras del Cabezo en Villamalur se encuentran en perfecto estado de conservación y parece evidenciar que fueron precipitadamente abandonadas ante el peligro de fuego por parte de las fuerzas fascistas, y por eso no debieron de sufrir grandes desperfectos, por lo que podremos andar por las trincheras y sentir la sensación que tuvieron los participantes de la contienda. Además, en el entorno también encontraremos antiguos hornos de cal o caleras. Se trata de construcciones que se hacían con piedra y fango, y en cuyo interior se realizaba una combustión con leña para obtener cal de las piedras calcáreas.

Desde aquí seguimos para visitar las Trincheras del Cerro Malo o Jupillo, también en perfecto estado y de nuevo con grandes vistas de la parte norte de Espadán, donde se aprecian las mayores cumbres como son Espadán, La Rápita o Alto del Pinar.

Dejamos las trincheras atrás para volver por la senda de nuevo al camino de acceso a las trincheras del Cabezo, pero esta vez seguimos por el camino hacia la izquierda, hasta la pista o carretera de Matet, que en poco más de un kilómetro nos dejará en el centro de Villamalur.

Esta ruta comparte gran parte del recorrido con la ruta de los 5 sentidos de Villamalur, que une el pueblo con el Castillo y las trincheras del Cabezo y el Cerro Malo o Jupillo, pero volviendo por la pista de Matet haciendo así el tramo circular.

Descripción de la ruta

0,00km. Partimos del centro de Villamalur junto a la Iglesia de Santo Domingo de Guzmán.

0,10km. Al llegar a la Fuente de la Era Concejo seguimos por el camino ascendente dirección al castillo.

0,75km. Tomamos el camino y senda de Ida/vuelta hacia la izquierda, dirección al Vértice Geodésico y Castillo de Villamalur.

1,60km. Tras descender del castillo continuamos por el camino hacia la izquierda.

2,25km. En la bifurcación seguimos recto por el camino dirección Trincheras del Cabezo

2,45km. Se acaba el camino y seguimos recto por la senda

3,10km. Trincheras del Cabezo

4,00km. Trincheras del cerro Malo o Jupillo

4,45km. En la bifurcación seguimos hacia la izquierda por la senda.

4,75km. En la bifurcación, seguimos por el camino de la izquierda.

6,10km. Al llegar a la bifurcación de la Pista de Matet seguimos hacia la derecha hasta Villamalur

7,30km. Fin ruta.

Flora

El Parque Natural de la Sierra de Espadán, con sus 32.000 hectáreas, es el segundo espacio más extenso de la Comunidad Valenciana, y si por algo destaca es por poseer la mayor masa de alcornoques de toda la Comunidad Valenciana, y en esta ruta podremos darnos cuenta de ello.

Esto es debido al mayor índice de pluviosidad existente en la sierra que, combinado con la existencia de afloramientos de areniscas, como son los suelos de rodeno (mineral que destaca por la alta absorción de agua) permite que el nivel de humedad ambiental sea relativamente alto, ayudando por tanto a la supervivencia del alcornoque. Además, también está presente el pino rodeno, tanto formando masas forestales independientes como acompañando a los alcornoques, y el pino carrasco, que comparte suelos calizos con las encinas. 

También es posible encontrar especies como el melojo, tejo, acebo, castaño, arce, quejigo, avellano o madroño. Otro ecosistema digno de mención es el formado por especies como el brezo, enebro o torvisco.

Adicionalmente hay zonas de cultivo de algarrobo, almendro, olivo, cerezo y otros frutales.

Fauna

La fauna de la sierra es rica y variada destacando el sapo común, sapo partero, la rana de San Antonio, el tritón jaspeado, la salamandra común o el gallipato entre los anfibios, el lagarto ocelado, la lagartija colilarga, la culebra de escalera y la culebra bastarda entre los reptiles.

Entre la avifauna las más representativas son las rapaces como el águila perdicera, el águila culebrera, el águila calzada, el azor, el cárabo, el búho chico y el búho real. También es posible encontrar otro tipo de aves como el arrendajo, el trepador azul, el petirrojo, el torcecuello o el pinzón.

Entre los mamíferos es de destacar la abundante presencia del jabalí, el zorro, la garduña, la gineta o el tejón, además de 16 especies de murciélagos, algunos en peligro de extinción. En los últimos años se está observando población de Cabra Hispánica procedentes del Maestrazgo y Alto Mijares.

Recomendaciones generales

La ruta se puede decir que es de baja dificultad, no obstante, hay que tener en cuenta que transita por algunos tramos con pendiente acusada, tanto de subida como de bajada con piedra suelta, por lo que hay que prestar especial atención a estos cortos sectores, que corresponden tanto a la subida y bajada al castillo, como a las Trincheras del Cabezo, en este último, con tramo de escalones con cadenas a modo de barandilla

Puede resultar peligroso hacer esta ruta con un calzado y ropa inadecuados o en días lluviosos donde habrá que mantener la tensión y la concentración durante todo el trayecto.

En verano es aconsejable llevar ropa ligera e ir bien provistos de agua y algo de comida como frutos secos, fruta y alguna barrita energética

Aplicarse antes y varias veces durante la travesía algún protector solar es muy recomendable.

Es una ruta que se disfruta mejor en cualquier época del año, pero es en verano cuando al alcanzarse altas temperaturas es aconsejable evitar las horas de máximo sol.

Antes de iniciar la ruta infórmese de las previsiones meteorológicas de la jornada. No camine bajo tormentas, días con niebla o con presencia de ventisca. Tener en cuenta los periodos de gota fría en la zona pueden resultar muy peligrosos.

Lea detenidamente la documentación de la ruta en nuestra web para hacerse una idea más precisa de las exigencias de la ruta, tanto físicas como técnicas.

Si realiza la ruta en solitario informe a alguien de sus planes y ruta concreta que va a realizar. No salirse del camino señalizado para evitar perderse y dañar especies vegetales por pisoteo. Respetar las zonas privadas.

Está prohibido recolectar frutos, ramas, hojas, plantas, piedras, ni animales y subirse a los árboles. No hacer ruidos que puedan molestar a la fauna sobre todo en época de cría y reproducción.

Mantener los perros bajo control y tener cuidado en épocas de procesionaria.

No acampar, no hacer fuego y sobre todo tener en cuenta que la basura no vuelve sola.